sábado, 13 de julio de 2013

Capítulo 10

- Nico… (Dije entrando en su cuarto, haciendo un esfuerzo muy grande por no largarme a llorar, otra vez)
- Pepe… ¿Y Pau?
- ¿Qué? ¿Ahora te importa más ella que yo? (Pregunté riendo y él también rio, me senté en su cama y lo ayudé a dar vuelta su silla de ruedas, para que quede frente a mí) Pau se quedó en mi cuarto, estaba un poco cansada.
- ¿Por el bebé, no?
- Sí… Por el bebé. Pero hablemos de vos. ¿Cómo estás? Te extrañé pendejo.
- (Rio) Yo también Pepe. (Sonreí) Yo estoy bien, bah, como siempre… ¿Vos? ¿Qué onda con Pau?
- Todo bien, Pau es mi amiga. Ya te lo dije.
- Mmm…
- Mmm… ¿Qué?
- Es más que tú amiga.
- (Reí) Nos conocemos hace muy poco tiempo.
- Pero… ¿Por qué no está con el papá de su bebé?
- Es una historia muy complicada Nico, pero no está con él, y él no quiere tener ese hijo.
- ¿Por qué?
- No sé por qué… Pero por eso yo la estoy ayudando.
- ¿Y la vas a seguir ayudando?
- (Reí) Es lo que quiero.
- No me preguntes por qué, pero esa chica es para vos. Acordate de lo que te digo.
- ¿En serio?
- Sí Pepe, además de que es muy linda, es muy buena… Tiene un alma muy pura, como la tuya. Sé que algún día se van a amar, y que van a ser felices juntos.
- Te tomo la palabra eh.
- Entonces te gusta.
- Sí… Y mucho. (Confesé sonriendo)
- Dale para adelante entonces hermano.
- ¿Alguna vez te dije que tus consejos y percepciones son las mejores?
- Emm… Sí. (Reímos y me acerqué a abrazarlo)

Un rato más tarde, volví al cuarto y Pau se había quedado dormida, pero sin querer se me cayeron las llaves y la desperté.

- Perdón, perdón. Seguí durmiendo.
- Mmm…. (Dijo y abrió los ojos) ¿Qué hora es?
- Casi las nueve, menos mal que vos no estabas cansada eh.
- (Rio) Bueno… Perdón.
- No tenes que pedir perdón tonta. Es más, si queres, podes seguir durmiendo. Y te aviso que estamos solos, los obligué a mis viejos a que salgan y se distraigan.
- No, mejor cocino algo para los tres…
- ¿Segura? Si estás cansada quedate.
- Segura, dormí bastante… (Extendió su mano) Ayudame. (Reí y le di mi mano, ayudándola a que se levante)
- Tus ojitos chinitos me dan mucha ternura.
- (Rio) Estoy dormida todavía.
- Se te nota.
- No seas malo. (Dijo riendo)
- Sos muy linda, incluso dormida. (Sonrió y se puso un buzo)
- Decime que cocino…
- Decime por qué cambias de tema.
- ¡Pedro!
- ¿Qué?
- Me da vergüenza.
- Al menos acepta que sos hermosa. (Ella bajó su mirada, sonriendo… Yo la tomé por el mentón, haciendo que me mire) En serio.
- ¿Te puedo pedir algo?
- Lo que quieras.
- No juegues conmigo, por favor. Ya sufrí y sufro demasiado… Si lo vas a hacer prefiero que seamos solo amigos.
- Primero, nunca jugaría con vos, todo lo que te digo es verdad… Y segundo, explícame eso de que preferís… Porque si preferís es porque existe otra opción.
- No, basta. (Dijo riendo, y yo también reí)
- ¿Basta con qué?
- Con esto… Me da nervios.
- ¿Ves que tengo razón cuando digo que sos hermosa?
- ¡Pedro! Basta, de verdad. (Respondió intentando ponerle resistencia a la situación y yo la seguí, la abracé por la espalda y besé su hombro) No tengas vergüenza, todo lo que digo y hago es porque lo siento… Igualmente tranquila que voy a respetarte, ya sé que nos conocemos hace tres días nada más.
- (Sonrió) Gracias Pepe, te quiero.
- Yo también te quiero Pau. (Besé su mejilla y la deje ir en dirección a la cocina)

-

Tenía miedo, mucho miedo. No estaba bien como para dejar que jueguen conmigo, y además, ya no estaba sola… Y, a pesar de que todavía no logro creer que esté adentro mío, no haría nada que afecte a mi bebé.

Suspiré y cerré mis ojos… Sería tan lindo poder dejarme llevar y saber que se siente, al menos besar a alguien que lo hace porque lo siente y no por calentura. Sería tan lindo conocer el amor.

Intenté distraerme en la cocina, y preparé la cena. Puse la mesa y los llamé…

- Cocinas muy rico Pau.
- Gracias Nico…
- Lo mismo digo. (Le dediqué una sonrisa y me dispuse a continuar con la cena. Sentí la mano de Pepe en mi rodilla y volví a sonreírle)

La cena se terminó y mientras yo ordenaba la cocina, Pepe lo acompañó a Nico a dormir, ya que debía ayudarlo.

- Dormí en la cama Pau, así estás más cómoda.
- ¿Seguro? Puedo dormir en el piso eh, no va a ser la primera vez que lo haga.
- Seguro… Tenes que cuidarte, dormí en la cama. De verdad.
- Bueno, gracias… Pero de verdad que no tengo problema.
- No lo vamos a discutir.
- Okei, okei. (Reí y me metí en la cama)
- ¿Estás bien? ¿O tenes frío?
- No, estoy bien. (Él apagó la luz de la habitación y también se acostó, en el carrito de la cama. Prendió el velador, yo posé las manos en mi panza y suspiré, y sin querer comencé a pensar en voz alta) Es increíble que estés adentro mío…
- ¿Ya lo sentís?
- Mmm… No. Creo que por eso todavía no soy muy consciente, o capaz sea por todo lo que me pasa… (Suspiré) Me da mucha culpa no poder estar disfrutándolo.
- Permiso… (Dijo y posó su mano sobre la mía) Vas a ver que de a poco todo va a pasar y lo vas a poder disfrutar como vos queres… Vos no elegiste todo esto Pau, no es tú culpa… Y si este bebé o esa beba llegó a vos en este momento por algo eso, todo pasa por algo.
- Hay cosas que no pasan por algo… Todo lo que me pasó a mí no tiene sentido. Excepto este bebé.
- Tenes que dejar un poco el pasado atrás.
- ¿Cómo queres que deje atrás todo lo que me pasó? ¡Me abusaron por casi diez años, me maltrataron, mataron a mis viejos delante de mi cara! ¿Cómo me olvido de eso Pedro? (Pregunté al borde de las lágrimas)
- No, no llores… Perdón, dije una boludes… Intentaba tranquilizarte e hice todo al revés.
- (Reí) No es tú culpa. (Suspiré) ¿Me das un abrazo? Por favor.
- Eso no me lo tenes ni que preguntar, pero haceme un lugarcito… (Yo me corrí y él se acostó a mi lado, me abrazó con ternura, haciendo que apoye mi torso y mi cara en su pecho)
- Gracias Pedro.
- Sh… (Corrió el pelo de mi cara y besó sentidamente su mejilla)
- Me hace bien que me abraces.
- (Sentí que me abrazó aún más fuerte) Entonces te abrazo fuerte, fuerte.
- Mi hijo y yo te vamos a agradecer toda la vida lo que estás haciendo por nosotros. Sos increíble.
- Ya te lo dije, lo hago porque lo siento…

9 comentarios: