lunes, 16 de diciembre de 2013

Capítulo 169

- Es horrible no saber cómo ayudarla Zai… (Dije angustiada)
- Tranquila amiga… En serio, estás haciendo todo lo que podes.
- No es suficiente.
- Sí Pau, creeme que sí.
- No, estoy segura de que no.
- (Suspiró) Espero que no te haya jodido que les ofrezca ir mañana, pero lo quiero hacer así yo me puedo quedar con Lola y ustedes pueden hablar tranquilos con la psicóloga, así saben qué hacer para ayudarla.
- (Sonrío) Sos lo más amiga, en serio. Gracias.
- No tenes nada que agradecer, lo sabes.


Era un poco más tarde, Zai se había ido y Pepe aún no había vuelto.

- Hermosa… (Dije, acercándome a ella que miraba tele en la cama)
- No me digas así.
- Hey… ¿Por qué? (Pregunté extrañada, y me senté a su lado)
- Porque no soy hermosa.
- ¿Cómo vas a decir eso mi amor? Sos la nena más hermosa de todas. (La abracé, de costado y besé su frente)
- No mami.
- (Apagué la tele y la senté frente a mí, en mis piernas) ¿Me explicas por qué decís eso Loli? Siempre te digo así, papá también. (Ella negó con su cabeza y escondió su cara en mi pecho, quebrándose. Yo suspiré y la abracé) ¿Por qué mi vida? ¿Pasa algo con tus compañeros otra vez?
- Sí.
- (La abracé más fuerte) ¿Qué?
- Me burlan porque lloro, y me dicen que soy fea porque lloro.
- (Suspiré, intentando contener mis lágrimas) No mi amor, no… Vos sos hermosa. (Besé su cabeza) Como te dijo Zai, muchas veces es normal que lloremos…
- Pero es feo.
- Ya lo sé mi amor, por eso mañana vamos a ir a mañana a la psicóloga, para que te ayude a vos a que se te pase la tristeza, y para que nos ayude a papá y a mí para que podamos hacer algo por vos.
- No quiero estar así más mamá.
- Te prometo que ya se va a pasar, te lo prometo chiquitita. (La abracé aún más fuerte)
- Quiero que venga papá.
- (Suspiré) Ahora le mando un mensaje a ver a qué hora viene princesa.

‘Amor… ¿Vas a volver muy tarde?’

‘Sí amor, perdón pero no puedo safar, estamos en el medio de la audiencia y esto viene para muy largo’

‘No, está bien, pregunto por Loli que pregunta por vos’

‘Ay, mi princesa… Decile que la amo y que en cuanto pueda voy a casa llenarla de mimos y besos’

‘Te prometo que se lo digo’

‘En cuanto tengamos una pausa la llamo’

‘Dale…’

- Me dijo que hoy va a volver muy tarde, pero que cuando llegue te va a llenar de mimos y abrazos.
- Lo quiero ahora. (Dijo llorando)
- Pero no se puede Lola, sabes que está trabajando.
- Ya lo sé, pero lo quiero igual.
- (Suspiré) ¿No queres dormir un ratito? Así se te hace más corta la espera… (Hice que se separé un poco de mí) Dale hermosa, no llores. (Sequé sus lágrimas y ella se acomodó sobre mí, apoyando su mejilla en mi pecho)
- Quedate conmigo.
- Siempre mi amor. (Besé su cabeza y, otra vez, comencé a mimarla hasta que se quedó dormida)

Lola se quedó dormida, y yo me levanté, con mucho cuidado, moría de hambre y volví a su lado, no quería que se despierte y no estar a su lado…

Pasaron un par de horas y escuché las llaves, era Pepe, sonreí, yo también lo necesitaba.

Con cuidado, salí de la habitación y corrí a abrazarlo.

- Hola mi amor. (Dijo y besó mi cuello, abrazándome también)
- Hola… (Dije quebrada)
- No llores.
- Perdón, es que necesito explotar con alguien. (Me separé un poco de él y lo besé) Pero entiendo que tuviste un día complicado y…
- ¿Y? Sabes que eso no tiene nada que ver, el trabajo lo dejo fuera de casa siempre que puedo, y hoy es claro que ustedes son más importantes. (Me besó) ¿Por qué lloras?
- A Lola, la burlan otra vez. (Dije con miedo de su reacción)
- ¿Me estás hablando en serio?
- Sí, porque llora y le dicen que es fea.
- (Suspiró y se separó de mí, para comenzar a caminar de un lado al otro) ¿Qué hicimos tan mal?
- (Suspiré) No sé amor, te juro que no sé. (Dije con lágrimas en los ojos y nos abrazamos)
- Tenemos que estar fuerte para ella, no debe ser solo eso lo que la tiene mal.
- Estoy segura de que no… Tengo miedo de que vuelvan a agarrarle los ataques de pánicos.
- (Suspiró) ¿Sacaste turno?
- Sí, para mañana a la tarde. ¿Vos podes ir, no?
- Sí amor…
- Zai me dijo que viene con nosotros, hoy estuvo acá, así podemos hablar a solas con la psicóloga y ella se queda con Lola.
- Es lo más.
- Se lo dije. (Nos separamos y nos dimos un beso) Anda a despertar a Loli que tenía muchas ganas de verte.
- Me cambio y voy…
- Dale, yo mientras preparo la cena.

-

Después de cambiarme, me acosté al lado de Lola y posé mi mano en su espalda, besé su mejilla y acaricié su carita, por un rato, hasta que se despertó.

- Papi… (Dijo y me abrazo, acomodándose sobre mí)
- ¿Cómo estás princesa?
- Te extrañé mucho.
- Ya me tenes acá hermosa… (Besé su cabeza y ella se acurrucó aún más en mí) ¿Estás un poco mejor?
- No, me duele el pecho y le conté a mamá que… (Y no siguió hablando)
- Ya me lo contó princesa… (Volví a besar su cabeza)
- Tengo miedo papi.
- ¿Miedo de qué?
- De que esto no se me pase.
- Sí que se va a pasar Lola, te lo prometo.
- No sé… (Dijo quebrando en llanto)
- Te prometo que se va a pasar hija. (La abracé más fuerte)
- ¿Mañana vas a ir con nosotras?
- Sí princesa.
- Gracias pa.
- No tenes que agradecérmelo mi amor, sabes que tengo que trabajar, pero también sabes que para mí lo más, más importante son vos y mamá. (Besé su cabeza e hice que demos media vuelta, ella quedó acostada en la cama y la llené de besos, y un poco de cosquillas)
- Basta papá.
- ¿No te gustan mis besos?
- Sí, pero no las cosquillas.
- Pero… ¿No es más lindo reírse que llorar?
- Sí, pero me duele el pecho y no quiero reírme.
- (Suspiré) Está bien mi vida. (La abracé contra mí) Pero no llores solita. ¿Sí? Confía en mamá, y en mí. (Asintió con su cabeza)
- A veces me da vergüenza…
- Sabes que no tenes que tenerla mi vida…
- Sí, pero igual…
- Lo importante es que sepas que podes confiar en nosotros. Lo sabes. ¿No?
- Sí papi.

Besé su cabeza y me quedé con ella, hasta que Pau vino con algo para cenar, y cenamos todos en la cama.

1 comentario:

  1. me pone mal que este asi , me hace acorda cuando iva al cole y me trataban mal y me decian muchas cosas feas

    ResponderEliminar