-
Pepe… (Dije acostada en la cama, acercándome a él)
- ¿Qué mi amor?
- Gracias, por cuidarme y por hacer que Loli me cuide, amo sentirme amada y
cuidada por ustedes. (Dije acomodándome sobre su pecho)
- (Me abrazó) Sos tan tierna… (Besó mi cabeza) Siempre te vamos a cuidar, y a
amar, mucho, mucho.
- Y yo a ustedes… (Suspiré y cerré mis ojos)
- ¿Estás cansada?
- Sí, no sé de qué, pero sí.
- Descansa entonces hermosa… (Apagó la luz y besó mi cabeza)
- Te amo mi amor…
- Te amo hermosa.
Me desperté, sintiéndome demasiado mareada y sin querer, lo desperté a Pepe.
- ¿Qué pasa amor?
- Perdón, te desperté…
- No importa… ¿Pasa algo?
- Estoy muy mareada.
- Mmm… ¿Queres algo salado? Debes de tener la presión baja.
- Por favor.
- Ahora te traigo amor… (Se paró y buscó unos almohadones) Levanta las piernas.
(Yo levanté mis piernas sobre los almohadones)
- Gracias amor.
- Sh… (Reímos y se fue, al ratito, volvió con aceitunas y agua, se acostó a mi
lado y me ayudó a sentarme, yo comí un poco y tomé el agua, hasta que volví a
acurrucarme en él) ¿Un poquito mejor?
- Sí, gracias. (Besé su pecho)
- De nada amor… (Acarició su brazo)
- Seguí durmiendo que mañana tenes que madrugar…
- Vos también necesitas descansar.
- Me pasó el día en la cama igual… (Dije riendo, y él también rio)
- El finde te prometo que nos lo pasamos acá los dos juntitos, y bueno, con
Loli…
- Por favor, pero al menos dejame ir hasta el sillón. (Reímos)
- Dejame cuidarte mi amor.
- (Sonreí) Sos lo más lindo del mundo, y me encanta que me cuides.
- Toda la vida te voy a cuidar.
- Te amo Pepe, mucho…
- (Sentí que me abrazó, muy fuerte, pero sin dejar de ser tierno) Te amo mi
amor… (Besó mi frente y yo cerré mis ojos) Descansa…
- Vos también Pau.
-
A la tarde siguiente, cuando volví de trabajar, Pau y Loli jugaban a las
cartas.
- Buenas tardes princesas… (Dije entrando al cuarto)
- Papi… (Corrió a mí y yo la alcé)
- ¿Cómo estás Loli? (Pregunté y besé su mejilla)
- Bien pa… (Me abrazó y yo también la abracé)
- ¿Segura?
- Sí…
- Mmm… Mimosa estás.
- Muy mimosa… (Dijo Pau y me acerqué a darle un beso)
- (Lola se bajó de mí) Me voy a mirar tele… (Dijo y se fue)
- Está muy rara. (Dijo Pau preocupada)
- La noto rara… (Me senté a su lado)
- Le pregunté si le pasaba algo, en la escuela o con alguien, pero me dice que
no… No sé.
- (Suspiré) Mmm… ¿Voy a comprar comida al Mac, helado y una película? Así la
llenamos de mimos. ¿Te parece?
- Dale… Decile si te quiere acompañar, capaz le hace bien salir un poco.
- ¿Y vos te quedas solita?
- Sí, no importa… (Me besó) La llamó a Zai y hablamos un rato.
- Bueno, dale… (Nos dimos un beso y fui en busca de Lola)
-
Esa noche, Pepe calentaba las hamburguesas y yo estaba con Loli en la cama…
- Hija… (Dije en su oído) ¿Segura que estás bien? (Besé su mejilla)
- Sí ma.
- Vos sabes que podes confiar en papá y en mamá. ¿No?
- Sí ma… (Repitió, sin mirarme)
- Mmm… (La abracé por la espalda y ella se acomodó sobre mí, sin decirme nada,
como había hecho todo el día, yo suspiré y la abracé)
Un ratito después…
- ¿Comemos? (Preguntó Pepe, asomándose por el umbral de la puerta)
- ¿Comemos Loli? (Pregunté, ya que ella no respondía)
- Bueno… (Dijo levantándose y se fue al baño, a lavarse las manos)
- (Se acercó a mí y me dio la mano para que me levante, yo suspiré y lo abracé)
No me gusta verla así. (Dijo también abrazándome)
- A mí tampoco, después de cenar hablamos con ella. ¿Te parece?
- Por favor, aunque ya no sé qué decirle para que me cuente…
- Capaz que entre los dos se lo sacamos… (Nos separamos un poco y nos dimos un
beso) ¿Vos? ¿Estás mejor?
- Sí, ya no me siento tan cansada… Igual la cama me tira, aunque me aburra.
(Reímos, y cuando fuimos a la cocina, Lola estaba esperando sentada en la mesa,
movía sus pies y miraba su plato, me angustiaba verla así, no saber cómo poder
ayudarla)
Cenamos, intentando incluirla en nuestras charlas, pero estaba demasiado
aislada, o encerrada en sí misma.
Cuando terminamos, dejamos todo en la cocina, sin lavarlo y yo la abracé a Lola
por la espalda, besé su mejilla.
- Loli… ¿Queres que veamos una peli los tres? (Ella negó con su cabeza)
- ¿No? Compré una peli nueva y helado. (Dijo Pepe)
- Mmm… Bueno.
- ¿No tenes ganas? (Pregunté)
- Sí… (Pepe me hizo señas de que la suelte, y así lo hice, él la abrazó,
sorprendiéndola y alzándola, demasiado alto, la hizo dar unas vueltas y ella
reía, yo también lo hice, hasta que la alzó normal, Loli rodeó su cintura con
sus piernas y su cuello con sus brazos)
- Así me gusta, que te rías princesa. (Y besó su mejilla, yo me acerqué a ellos
y posé mi mano en la espalda de mi hija)
- ¿No queres contarnos qué pasa?
- No pasa nada mamá, ya te lo dije.
- Loli… (Dijo Pepe) Vos no sos así, sos más alegre, más charlatana…
- Pero no pasa nada, solo estoy cansada.
- ¿Segura? (Pregunté)
- Sí, basta. (Yo suspiré y besé su hombro)
- ¿Vamos a la cama?
- Sí hermosa, vamos. ¿Buscas el helado Pau? Yo me llevo a la enana.
- Dale…
Ellos se fueron, y yo agarré el helado, intenté que mis ojos no se llenaran de
lágrimas, pero fue inútil, me sentía una mala madre, y no había sensación más
horrible que esa.
Me metí en la cama con ellos, y cuando se terminó el helado, me acomodé al lado
de Loli, quién estaba en el medio y apoyé mi mano en su hombro, apoyando mi
cabeza allí.
Lola unió su cabeza a la mía y sonreí.
- Te amo Lola. (Susurré en su oído)
- Yo también mami. (Volví a sonreír y cerré mis ojos, necesitaba dormir, aún no
estaba recuperada, y no podía más)
No hay comentarios:
Publicar un comentario