No lo escuché entrar, me
sorprendió abrazándome por la espalda mientras yo miraba la ciudad apoyando mis
brazos en la baranda del balcón.
- Hola hermosa.
- (Cerré mis ojos) Gracias por apurarte.
- (Besó mi cuello) No fue nada, siempre es un placer volver y encontrarte.
- (Sonreí) Es un placer estar cuando volves, y más cuando necesitaba este
abrazo.
- (Me abrazó más fuerte) ¿Estuviste llorando?
- ¿Por qué me conoces tanto?
- Tenes la voz cargada de angustia, y eso te pasa cuando lloras.
- Repito la pregunta. (Reímos y yo me di vuelta, para poder abrazarlo yo
también)
- ¿Y ahora vas a volver a llorar? (Y yo no pude responderle, porque me quebré,
otra vez) No amor, no.
- No puedo controlarlo.
- (Besó mi mejilla y yo escondí mi cara en su hombro) No lo controles, si
necesitas llorar, hacelo. Es pero que reprimas el llanto.
- Pero no lo soporto más.
- (Se separó un poco de mí, haciendo que nos miremos a los ojos) Vos podes.
- No, ya no.
- Amor. ¿Vos te das cuenta que cuando estás mal siempre te negas a seguir y
después te das cuenta de que si podes, no?
- No sé.
- ¿Qué no sabes?
- Si puedo… Si no, no estaría así otra vez.
- Es normal que te agarren bajones, más volviendo acá. Y perdón por eso, en
serio. Me siento el culpable de tú llanto y no hay nada que me haga peor que
eso.
- No mi amor, no. No es tú culpa, no pienses más en eso, por favor.
- Pero yo te traje acá.
- Pero vos no mataste a mi hijo, no es tú culpa. En serio.
- Pero…
- Sh. (Lo besé) No es tú culpa.
- (Secó mis lágrimas) Odio verte llorar.
- Abrazame así se me pasa entonces. (Él volvió a abrazarme y yo no podía dejar
de llorar, ya no sabía cómo mierda tranquilizarme) Perdón por siempre recurrir
a vos, pero sos el único que me tranquiliza, tus brazos me hacen sentir
protegida.
- No tenes que pedir perdón Pau, amo abrazarte, sentirte cerquita, y por sobre
todo, amo saber que te hago bien… Bah, no, sobre todo, todo, amo amarte.
- Y yo a vos mi amor, sos lo más lindo, lo mejor y lo más puro que tengo.
Estábamos unidos en un abrazo de esos que dan la impresión de que somos uno, y
nada me tranquilizaba más que eso, sentir ese lazo invisible que nos unía.
Pepe estaba con su familia y yo me había apartado a hablar por teléfono,
necesitaba hablar, al menos un rato, con mi psicóloga.
Antes de unirme a la charla familiar, pasé por el baño, a lavarme la cara y a
terminar de tranquilizarme. Luego me puse un buzo, y la capucha del mismo.
(Como si eso fuese a disimular algo) Y me dirigí al living.
- Veni Pau. (Dijo Pepe y yo me senté a su lado en el sillón, él posó su mano en
mi pierna y yo le sonreí) ¿Mejor? (Susurró y yo asentí con mi cabeza)
- ¿Pasa algo chicos? (Preguntó Ali)
- No vieja, nada.
- ¿Seguros?
- Sí Ali.
- Mira que podes confiar en nosotros Pau.
- Gracias, pero estoy bien… Estaba hablando con mi psicóloga.
- Está bien Pau, pero sabe que si necesitas algo podes contar con nosotros.
- Muchas gracias Ali, en serio.
- De nada Pau. (Se levantó) Voy a preparar la comida.
- Te ayudo.
- No hace falta.
- Sí Ali, dale. No me cuesta nada.
- Como quieras, pero en serio. (Se fue)
- (Le di un beso a Pepe) No me extrañes.
- (Sonrío) Vos no estés mal, porque si no te rapto y nos encerramos en la pieza
hasta que se te pase la angustia.
- (Negué con mi cabeza y susurré) Te amo mi amor.
- Te amo hermosa. (Nos dimos otro beso y yo me fui a la cocina)
- Pau, no quiero presionarte, pero de verdad que podes contar conmigo.
- Gracias, en serio… Solo fue que me hizo un poco mal volver acá, por todo lo
que pasó, pero ya está.
- Es un dolor inmenso, lo sé… Pero con el tiempo pasa.
- No sé, ya no sé nada.
- Te aseguro que sí, te lo digo porque yo lo pasé… Antes de Pepe perdí un
embarazo.
- Perdón que te lo diga, pero no es lo mismo perderlo a que lo maten. (Dije con
los ojos llenos de lágrimas)
- No, tenes razón. Es distinto, pero con el tiempo la herida empieza a
cerrarse.
- ¿Cuánto tiempo? No lo soporto más.
- (Ella secó suavemente mis lágrimas) Tiempo chiquitita, tiempo.
- Sufrí demasiados años, te juro que no doy más.
- Si la vida decide que sufras es porque si podes, es porque podes soportarlo.
Dios le da las peores batallas a sus mejores guerreros. Seguís de pie Pau.
- (Suspiré) Pero hecha pedazos por dentro.
- De a poquito vas a poder unirlos, estoy segura. Sos una mujer fuerte, y se te
nota, de verdad.
- Ya no sé de dónde sacar fuerzas.
- Por algo mi hijo se cruzó en tú vida Pau.
- Es el único que me mantiene de pie, pero ya me siento horrible, lo único que
hace es consolarme… No debe estar bueno para él, tengo miedo de que eso lo
aleje de mí.
- No Pau, te aseguro que no… Conozco a mi hijo, muchísimo y nunca lo vi así con
una mujer que no seas vos, se le nota cuánto te ama hasta cuando te mira, jamás
te dejaría, y además, él siempre fue de ponerle el hombro a los demás y
reprimirse él.
- Lo sé, me cuesta un montón que se abra cuando está mal.
- ¿Pero lo termina haciendo, no?
- Sí.
- Esa es la prueba más fuerte que podes tener de que te ama, jamás habla con
nadie… Sí lo hace con vos es porque te siente especial, porque te ama.
- (Sonreí) Yo también lo amo.
- Y también se te nota… (Hizo una pausa y tomó mis manos) Tranquila, dale
tiempo al tiempo, yo estoy segura de te espera un futuro muy lindo, les espera
un futuro muy lindo, los dos se lo merecen.
- Eso me gustaría creer.
- Créelo, porque va a ser así.
- ¿Y cómo estás tan segura?
- Porque son dos personitas muy puras, que se lo merecen. (Me abrazó y yo
también la abracé) No llores más que sino después mi hijo me reta.
- (Reí) Tranquila, yo puedo explicárselo. (Volvimos a reír y luego de una
pausa, le dije) Gracias Ali.
- ¿Por qué?
- (Me separé de ella) Porque por un momento te sentí mi mamá.
- (Sonrío) No quiero ocupar el lugar de tú mamá, pero me hace bien saber que me
sentiste así, y sabe que siempre que necesites hablar con alguna mujer que te
haga de referente podes llamarme.
- Gracias, en serio. (Volví a abrazarla)
Un rato después, mientras cocinábamos, Pepe me sorprendió abrazándome por
atrás, por el cuello y besó mi mejilla.
- ¿Estás bien?
- Sí Pepe.
- ¿Segura?
- ¿No confías en mí? ¿Tan mal crees que la trato? (Preguntó Ali reímos y todos
reímos)
- No mami, es solo que me preocupo por mi novia. (Sonreí y giré un poco mi
cabeza para poder darle un beso)
Ayyy subí otro cap! AMO como escribis!!!! Vos si tenes un talento!
ResponderEliminarMe encantaron los capitulos de hoy Cami.
ResponderEliminarme encanto el cap!! gracias por subir doblete jajaajja :)
ResponderEliminar