Lola
ya estaba con Zai, yo cocinaba para Pepe y para mí, feliz. Muy feliz. Sentí a
Pepe abrazándome por la espalda y besó mi nuca.
- No lo puedo creer…
- Te juro que yo tampoco… (Respondí)
- Igualmente, necesito que hablemos.
- (Suspiré) ¿Por qué?
- ¿Te falta mucho?
- No, ya pongo la carne en el horno.
- Te espero en el living. (Besó mi cuello y se fue)
Terminé con la carne y caminé temerosa a encontrarme con Pedro, me senté como
indio frente a él y espere a que hable.
- Saca esa carita de asustada, no es una mala noticia. (Reí y él acarició mi
mejilla con su dedo gordo)
- Decime.
- Tengo miedo de que te enojes.
- ¡Pedro! Me dijiste que no era una mala noticia.
- No, no es una mala noticia… Pero hice algo sin tu consentimiento, y tengo
miedo de que te enojes.
- Habla nene.
- (Rio y tomó mi mano) Inicié los trámites de adopción… Sé que son eternos, por
esos los inicié… ¿Hice mal? Ahora deberíamos ir a hacernos los análisis
psicológicos y todo eso que te piden…
- ¿Me estás hablando en serio? (Pregunté al borde de las lágrimas)
- Sí mi amor… (Sonreí y me acerqué a darle un beso, luego lo abracé y sentí que
él también me abrazó)
- Nada me haría más feliz qué que la vida me regalé la posibilidad de ser mamá
otra vez.
- Te prometo que eso va a pasar, te lo prometo mi amor. (Hizo que me separé un
poco de él y me besó)
- Siento que voy a explotar de felicidad. (Sonrío y besó mi nariz)
- No, no explotes que te necesito. (Dijo riendo y yo también reí) Igual… Para…
Esto va en serio. (Hizo una pausa) ¿Estás dispuesta a pasarlo todo? Es un
proceso muy lento, muy lento y creeme que lo sé. Te dan mil vueltas, y sí, yo
puedo hacer algunas cosas más rápido, pero solo las que dependen de la parte de
un abogado, aunque seguramente me las firme mi socio.
- ¿Eso es legal?
- Obvio amor, yo trabajo y él pone la firma, siempre se hace.
- ¿Seguro?
- Sí Pau, jamás haría algo que nos pueda perjudicar, es simplemente porque no
da que yo firme algo que estoy pidiendo yo… Es solo eso. (Volvió a hacer una
pausa) Entonces… ¿Estás dispuesta?
- Sí te tengo al lado mío, sí que lo estoy.
- Siempre voy a estar al lado tuyo.
- (Sonreí y nos besamos) Te amo mi amor, más de lo que te pueda explicar.
- Te amo con el alma entera… (Me besó y nos sonreímos, para volver a unir
nuestros labios)
Cenamos y cuando terminamos, comíamos helado en el balcón.
- Amor… (Dije abrazándolo por el cuello)
- ¿Qué mi amor?
- ¿Vamos a poder?
- Sí que vamos a poder, es lento, pero si va todo bien, en algún momento va a
pasar.
- No, no me refiero a eso.
- ¿Y a qué te referís?
- A que… (Suspiré) Es muy difícil traer a un nene o a una nena que viene
sufriendo muchísimo… ¿Vamos a lograr sacarla de ese sufrimiento? ¿Qué se adapte
a nosotros? ¿Qué nos quiera?
- (Corrió un mechón de pelo que caía encima de mi cara y chocó mi frente a la
suya) Duda de cualquier cosa menos de eso mi amor, tenes muchísimo amor para dar,
y estoy segura de que ese nene o esa nena va a poder recibirlo… Va a querer
hacerlo.
- Ojala Pepe. (Dije refugiándome en su pecho)
- (Me abrazó y acarició mi hombro) Vas a ver que sí… (Suspiré y nos quedamos
allí por un largo rato)
Comenzó a llover, asique entramos y nos preparamos café.
- Estás muy lejos… (Dije a modo de queja y él sonrío, sonrisa que me contagió.
Dejó la taza a un lado y me tomó de la mano, haciendo que quedé sentada sobre
él, frente a él. Me abrazó por la cintura y me aferró aún más a su cuerpo) No
era para que te lo tomes tan literal… (Dije riendo)
- Te tengo toda para mí, pienso aprovecharte.
- ¿A sí? ¿Cómo?
- ¿En serio no sabes?
- Mmm… No. (Se hundió en mi cuello, llenándome de besos. Yo sonreí y susurré en
su oído, mientras lo aferraba a mí por su cuello) Sos muy predecible Alfonso,
pensé que por primera vez ibas a hacer algo distinto.
- (Rio) Puede ser distinto, si dejas de ser clásica.
- ¿Y cómo sería eso? (Pregunté)
- No solo existe la cama, ni las superficies acolchadas.
- Me das un poco de miedo.
- (Rio) ¿Ves? Sos una aburrida.
- Jodete, estás con una mujer aburrida.
- Pero demasiado sexy.
- (Reí) Sabes cómo endulzarme los oídos.
- Agarrate de mí.
- ¿Por qué?
- Hace lo que te digo.
Yo me aferré a él y él se paró, sin soltarme, reí y me llevó hasta la cocina…
Me sentó en la mesada y me besó, sin dejarme ni respirar.
- Estás loco.
- Por vos Paula, como el primer día. (Mordí mi labio inferior y lo besé)
- ¿Sabes que es lo que más me enamora de vos?
- ¿Qué?
- Que pasan los años y sigo sintiendo lo mismo cada vez que te siento cerca,
cada vez que me besas, cada vez que siento tu mano unida a la mía… Cada vez que
siento tu piel, tú respiración cerca de mí… Me seguís matando de amor, me sigue
erizando la piel, me sigue volviendo loca que hagas todo eso. (Me separé un
poco de él, solo para poder mirarlo a los ojos) Siempre creí que eso era solo
al principio, me doy cuenta de que no, y amo que sigas generando todo eso en
mí… Te amo a vos, con locura, con mi vida entera.
- Me pasa exactamente lo mismo, me volves completamente loco… (Mordí su labio
inferior y él sonrío, pícaro) Te amo, sin vos no sería nada, nada… Y espero
poder seguir generando eso hasta el último día, y que pase lo mismo de tú parte
en mí. (Nos sonreímos y nos besamos, para terminar haciendo el amor)
Estaba en la cama, esperándolo… Se
acostó a mi lado y besó mi mano.
- Jamás podría tener a mi lado una mujer más hermosa…
- (Sonreí) Ni yo un hombre tan comprensivo. (Nos besamos y él quedó sobre mí)
- Te amo mi amor…
- Te amo Pepe. (Nos besamos y él me abrazó, sin salir de encima de mí)
- No me digas que peso, ya lo sé.
- ¿Y entonces?
- ¿Entonces qué?
- ¿Me queres dejar sin aire?
- Prefiero dejarte sin aire, pero con besos.
- Me gustaría más… (Reímos y dimos una vuelta, quedando yo sobre él y no dejó
de besarme, durante un largo rato, amaba que sea así de literal) Jamás me
aburriría de tus labios.
- Creeme que yo tampoco. (Volvió a besarme)
Puedo pasar toda la madrugada besándote.
- Sería un placer. (Sonreímos y nuestros labios estuvieron unidos por
demasiados minutos, hasta que me acomodé sobre él y sentí sus brazos rodearme)
¿Te dije que amo que estemos así, no? Amo volverme a sentir tú novia.
- (Rio) Sos mi mujer, siempre vas a serlo… Cuando estemos los dos solos o con
nuestra hija… O más adelante con…
- (Lo interrumpí) Lo decís y se me eriza la piel… Pero igual me refería a esto,
a estar así con vos, a que me hagas hacer locuras en la cocina. (Reímos)
- Sos demasiado clásica, ya te lo dije. (Volvimos a reír) Pero te amo así…
- Menos mal. (Dije riendo) Te amo, aunque me hagas hacer locuras. (Reímos y nos
quedamos dormidos, mientras nos mimábamos)
que lindo capítulo,me encanto...
ResponderEliminarmuy lindo, Gracias por escribir y haceme leer en este 2013 que se fue una nove muy linda te mando besos y espero que me sigas acompañando en este 2014 con tus escrituras besos @iara_tefiPyP Feliz Año nuevo
ResponderEliminar